Descripción del caso:
Doña Amelia, que no sufre ninguna patología previa, tras un embarazo normal y controlado por su ginecólogo, Dr. D. Basilio, pare de forma natural asistida por el Dr. D. Fulgencio. Algunos días después comienza a sentirse mal, y sufre varios infartos cerebrales que le provocan una minusvalía del 80%.
La madre, es una mujer de 38 años con un embarazo corriente que es seguido por el Dr. D. Basilio, quien la somete a las pruebas adecuadas para el control de la gestación, realizándole incluso una amniocentesis para descartar posibles malformaciones fetales debido a la edad de la madre.
El día 23 de marzo, tras soltar el tapón mucoso, fue remitida pro el Dr. D. Basilio al Hospital para dar a luz y donde fue atendida por el Dr. D. Fulgencio y permaneció tres días ingresada. El día 29, como sigue sangrando acude al Dr. D. Basilio quien comprueba que tiene la tensión alta, (17/8) y le practica una ecografía donde aprecia una imagen compatible con restos placentarios y es citada para el día 5 de abril.
El día 2 de abril acude al centro de salud al sufrir fuertes dolores de cabeza, y el día 5 acude nuevamente a la consulta del Dr. D. Basilio donde le detectan posibles restos placentarios y es citada para el día 7 donde le practica un legrado y dada de alta el día 8 por la mañana.Esa misma tarde y tras sentirse muy mal acudió al Hospital donde le diagnosticaron y certificaron las terribles consecuencias que le acarrearon los infartos cerebrales que sufrió.
Como en tantos casos de negligencias médicas, ni los médicos, ni el Hospital admiten la más mínima responsabilidad por lo que la Sra. Amelia tiene que acudir a los juzgados para hacer valer sus derechos.
De una pretensión inicial de 467.000 €, se obtuvieron 146.000 € en el Juzgado de primera instancia, siendo preciso acudir a la Audiencia Provincial y al Tribunal Supremo para alcanzar la cifra definitiva de 345.000 € por esta negligencia médica.
Se condenó únicamente al Dr. D. Basilio, quedando el Dr. D. Fulgencio absuelto de todo pedimento económico.
Ferrer Salinas Abogados, expertos en reclamaciones por errores y negligencias médicas.
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