Descripción del caso:
Dña. Erica fue sometida a una intervención quirúrgica consistente en una reducción de pecho por motivos estéticos y por la que abonó 2.900 €. El resultado final de dicha operación dista mucho del desenlace que la paciente esperaba y deseaba:
“Hay una deformidad y una asimetría que no existían antes de la intervención; así, presenta unas secuelas físicas, consistentes en asimetría mamaria, cicatrices queloideas en ambas mamas, asimetría y retracción de la areola mamaria y del pezón de ambas mamas y pérdida de sensibilidad en ambas mamas y dolor a la presión sobre las mismas, todo lo cual le comporta un importante perjuicio estético, así como una secuela psíquica, consistente en un síndrome depresivo postraumático del que se encuentra en tratamiento, repercutiéndole en su conducta, autoestima y relaciones interpersonales y sexuales, todo ello como consecuencia de la operación y del estado en que ha quedado tras la misma”.
En esta situación no queda otra opción que denunciar tanto al facultativo, Sr. D. Andrés como a la Clínica donde se realizó la cirugía estética para que respondan de forma solidaria por los daños físicos y psíquicos causados.
De una pretensión inicial de 26.000 , Dña. Erica obtiene un a sentencia que condena de forma solidaria al facultativo al facultativo que realizo la intervención y a la Clínica donde ésta fue realizada, consiguiendo una indemnización de 14.000 €.
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